Según los resultados de la más reciente “Encuesta de percepción ciudadana 2019”, realizada por Bogotá Cómovamos, los ciudadanos sienten que TransMilenio, en su componente Troncal (buses rojos) ha mejorado. El 23% de los encuestados están satisfechos con el funcionamiento del Sistema, lo que demuestra una mejoría en la percepción ciudadana, pues aumentó 5 puntos porcentuales en comparación con 2016, cuando la satisfacción con el Sistema rondaba el 18%. Así mismo, 13% de los encuestados afirmaron que ha mejorado el servicio.

Esto se debe, en gran medida, al proceso de reingeniería que está viviendo actualmente el Sistema y a la renovación de la Flota de las Fases I y II, con 1.441 buses nuevos con tecnologías amigables con el ambiente, y de los cuales el 67% son biarticulados. Actualmente están rodando 840 de estos vehículos, y los restantes ingresarán de manera gradual hasta mediados de 2020. Sus nuevas características como sillas laterales para facilitar la movilidad y cámaras de seguridad, la transición de rutas anteriormente operadas por articulados a biarticulados y las 160.000 plazas adicionales con las que contará el Sistema son algunos de los factores que determinaron la percepción positiva por parte de los usuarios en este proceso de renovación que aún no ha terminado.

Por otra parte, en cuanto al componente Zonal (buses azueles) el 24% de los encuestados manifestaron no estar conformes con el servicio, mientras que en 2016 el 32% estaba satisfecho con el mismo. Justamente por esta razón, y consientes del deterioro en la prestación del servicio y los problemas económicos y operacionales que acarreaban los concesionarios, esta administración firmó un OTROSÍ con 6 concesionarios a manera de salvavidas para garantizar la prestación del servicio, mejorar su calidad y aumentar así la percepción de favorabilidad en los usuarios. De esta manera la Alcaldía y TRANSMILENIO S.A. desactivaron la bomba atómica del SITP.